TIZADOR DE CADÁVERES: 2009
Eran las 4 de la mañana cuando nos convocaron a las urnas para votar si debía o no abandonar el sueño, se presentaron sombras y arquetipos, reconocí en sus manos puzzleáticas una sinécdoque marítima con suficiente arrogancia y dinero como para no ser uno mas, ella estrechó mi cara con sus pulgares seagalescos y apartó con un ...